y al hacerlo te mentí,
era poco lo que dije
para lo que necesito decir.
Decirte que me admitas
ermitaño en tu corazón,
que bañes mi vida con tus besos,
me enturbies la razón,
obstruyas la lógica de mis sesos,
seas la carcelera
de la más bella prisión.
No quiero ser libre,
enciérrame en la celda más pequeña
cercana a tu corazón.
Eres de mi vida dueña,
prisionero de tu amor.
Interno en cárcel sin pena
te pido, carcelera, un favor:
¡obsequiame con larga condena!.
aunque no vea más el sol
De todo esto que te digo
aún te digo poco.
¿Como decirte lo que te quiero?
¡COMO SE EXPLICA UN LOCO!
JL GuerreroM
PARA LOS LOCOS BAJITOS
EL REGALO DE VICENTA
LA SEÑORA ARAÑA
La señora araña
tejía, tejía...
sin ningún descanso
una tela fina.
Un poco curiosa
dijo su vecina:
-"Mi señora araña,
¿por qué tanta prisa?"-
-"No hay por qué extrañarse
mi querida amiga,
es que este domingo
se casa arañita.
he de hacer su velo,
también mi mantilla
pues en esta boda
yo soy la madrina"-.
Se pasó la noche,
y al llegar el día
la señora araña
tejía, tejía...
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